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Los Mandalas

Mandala es una palabra que significa “círculo” en lengua sánscrita. Para la cultura budista es la representación simbólica del universo, del significado de la vida y del ser humano; se encuentra conformada por un conjunto de figuras concéntricas distribuidas en diferentes niveles, que representan las características más importantes del cosmos y del hombre, y su objetivo es crear un punto de concentración de la energía durante la meditación.
Los mandalas tienen su origen en la India pero se han propagado por muchas partes del mundo, teniendo principalmente un uso espiritual, sin embargo desde hace unos veinte años se viene utilizando en países de Europa en ambientes educativos y de rehabilitación. Carl Jüng (1875-1961) utilizó los mandalas en terapias ante la búsqueda de la individualidad del ser humano, refiriendo que “los mandalas representan la totalidad de la mente, abarcando tanto el consciente como el inconsciente”.

¿Cómo se trabaja con ellos?
Los mandalas se pueden pintar o crear, esto dependerá de la edad del niño. Cada mandala representa al ser humano, así que trabajar en ellos debe significar una labor dedicada y paciente. Debe ser trabajado en
un sitio tranquilo y en silencio. Se debe pintar de adentro hacia afuera si se quiere expresar algo y de afuera hacia adentro si se quiere hacer una introspección, usando colores que el niño elija por sí mismo. Si se
comienza un mandala debe terminarse ese mismo día, porque no todos los días tenemos el mismo estado de ánimo, y debe pintarse en una sola dirección. El pintado es libre, el que lo pinta decidirá cuándo el
mandala está terminado.

Uso de los mandalas:

Para estimular el aprendizaje: sirven como un instrumento motivador en las diferentes áreas de enseñanza.

Para expresarse: a través de la técnica del dibujo y el pintado, utilizando colores y otros materiales, el niño deja al descubierto su mundo interno, ideas, sentimientos, pensamientos e inquietudes.

Para relajarse: los niños aún no saben combatir el agotamiento y la carga emocional, los mandalas ayudan a mejorar la concentración y la abstracción.

Nota:
Papitos recuerden que esta técnica de los Mandalas lo plasmaremos en nuestra actividad que se realizará celebrando los derechos del niño.

Fuente: Noti Aula - Faber Castell

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